La digitalización es fundamental para la continuidad y expansión de la actividad económica, y durante la última década, los países de las Américas han logrado avances significativos en el despliegue del acceso a internet y las tecnologías digitales, lo cual fue acelerado por la pandemia de COVID-19.
Para mantener el impulso con las iniciativas digitales, los países de las Américas deben centrarse en lograr el acceso universal a la conectividad y las tecnologías digitales, junto a acelerar los procesos de digitalización con sentido de urgencia. Las políticas gubernamentales deberán continuar fomentando la transformación digital en todas las industrias, centrándose en áreas donde la digitalización puede tener un impacto especialmente crítico. Estas incluyen el uso de la tecnología para reducir la brecha de talento en la educación y brindar acceso equitativo a los servicios gubernamentales, financieros y de salud.
Junto con los avances significativos en la adopción de tecnologías digitales, existe un enorme desafío por delante en el despliegue de regulaciones y políticas relacionadas con lo digital que promuevan la productividad y el crecimiento de toda la región. Hoy, la digitalización no es una opción para las Américas, es un imperativo que definirá cuán próspero será el futuro de la región.
Chair(s):